martes, 25 de enero de 2022

Blacked Family

 

Capítulo 2

Domingo en la mañana

Te despiertas para escuchar un sonido que viene de la cocina y ves que tu adorable esposa ya no está en la cama, es seguro asumir que está preparando el desayuno. Por un glorioso instante casi te puedes convencer de que lo sucedido la noche anterior solo fue un sueño, un extraño y horrible sueño. Tu sexy, hermosa, modesta y perfecta esposa, con la que llevas veinte años casado no podría haberse masturbado frente a ti mientras veían una película de porno interracial, ¿verdad?

Pero por más que lo quisieras negar los recuerdos eran reales, sí Hannah tu sexy y tetona esposa, se había excitado mientras veía a un enorme hombre negro follar como a una puta a una actriz que era casi idéntica a ella misma, sí fue tu esposa quien murmuró palabras de adoración hacia una enorme verga negra de doce pulgadas, y sí fue Hannah quien enfadada había defendido la actitud violenta y machista de ese enorme macho negro, diciendo que cuando un hombre negro llamaba puta a una niña blanca era un cumplido y no un insulto.

Por fin reuniste las pocas fuerzas que tenías y te levantaste, después de tomar una rápida ducha bajas las escaleras y la escuchas hablar con tu hijo Alex.

“¡Fue hermoso, Alex! ¡Había una pasión tan cruda en la pantalla que creo que realmente te gustaría!”. Escuchas de Hannah.

Sí, mami. Suena a que estuvo muy bien, quizás lo veré más tarde”. Escuchas a Alex responder suavemente.

Bueno, todo lo que dice es suave y dulce, increíblemente su voz es más delicada, musical y suave que le de su madre y hermana, es muy afeminado y piensas que podría ser gay, pero nunca ha dicho nada al respecto y nadie lo ha presionado, asi que supones que aún está en el closet.

Doblas la esquina hacia la cocina y miras a Hannah sonriendo.

“¡Ahí estás!”. Dice mientras pone un poco más de pan en la tostadora.

“¡Buenos días!”, saludas, mientras intentas olvidarte de lo sucedido anoche. “¡Hola Alex!”.

Y entonces ves a tu hijo varón, Alexis Smalls, o como todos le llaman Alex, está vistiendo una vieja playera negra con el logo de una banda de rock como pijama, es enorme, al menos tres tallas más grandes que él, le llega a mitad de sus gruesos y bien torneados muslos blancos y lampiños, ni un solo vello parece crecer en la blanca piel de Alex, nunca se ha tenido que rasurar, y no parece que lo valla a necesitar pronto.

Alex cumpliría los 18 años pronto, el 26 de septiembre, hoy es una hermosa mañana de domingo, domingo 12 de septiembre, tu delicado hijo había comenzado su último año en preparatoria la semana pasada.

Tu esposa estaba realmente emocionada por organizar la fiesta de su niño especial.

Y Alex es en realidad un niño muy especial, es bastante pálido, incluso es más blanco que su madre y su hermana, su piel blanca como la porcelana era delicada y frágil, sus hombros son estrechos, su cintura es tan delgada y estrecha como la de una bailarina de ballet, su cabello es un poco rizado como el de su madre, pero color rubio fresa, casi rosa, le llega hasta las orejas, ese color rosa es tan intenso que es casi imposible de creer que sea natural, pero lo es, heredado de su abuela Ruth, tu madre.

El rostro de Alex es extremadamente hermoso, pequeño, afilado, infantil y lindo,  con una pequeña nariz linda y respingona, unas finas y largas cejas femeninas enmarcan unos enormes ojos de cierva color verde grisáceo, idénticos a los ojos de Hannah, esos hermosos y melancólicos iris son custodiados por unas largas tupidas y rizadas pestañas, Alex había heredado todos los hermosos delicados y femeninos rasgos de su madre, y eso incluye sus gordos labios, sus rosados, jugosos y suaves labios son más pequeños que los de Hanna, y por lo tanto se ven aún más gordos e hinchados, como si Alex estuviese haciendo un lindo puchero todo el tiempo, son los sexys labios de una puta.

Sorprendentemente lo que más llamaba la atención en su hermoso rostro de muñeca de porcelana son sus bonitas y afiladas orejas. Sus delgadas, alargadas y un poco puntiagudas orejas le dan el aspecto de un elfo de cuento de hadas, o el de una pequeña y hermosa hada, avergonzado de ello Alex lleva el cabello largo en un corte estilo Bob para cubrir sus afiladas orejas.

Su piel de porcelana está salpicada de cientos de diminutas pecas rosadas estratégicamente colocadas, tiene pequeñas constelaciones repartidas por todo su delicado y pálido cuerpo, en el puente de su nariz, en sus hombros, en sus caderas, en su vientre y desde su espalda baja hasta el inicio de sus nalgas, lo sabes porque tú lo bañaste hasta que cumplió los diez años.

El delicado niño blanco es incluso más pequeño que tú, con 1.60mts de altura, parece un infante y no alguien que está a dos semanas de convertirse legalmente en adulto, sus hombros son estrechos y delgados, sus brazos finos y elegantes, sus manos son pequeñas y delicadas, las suaves y elegantes manos de una princesa.

Alex es demasiado delicado y suave, pero no solo es el aspecto físico, su comportamiento, su personalidad, e incluso sus movimientos y amaneramientos son extremadamente femeninos, por ejemplo, Alex tiene la costumbre de caminar sobre las puntas de sus delicados y pequeños pies, como una bailarina de ballet, siempre un pie delante del otro, contoneando sus caderas de un lado al otro a cada paso, con la espalda recta, los hombros atrás y el pecho hacia adelante, los brazos a los lados con las muñecas dobladas hacia afuera en un gesto extremadamente  amanerado y femenino como si siempre estuviese usando un tutú de tul, sí, Alex camina y se mueve como si estuviese bailando ballet todo el tiempo… lo cual es culpa tuya, te recuerdas a ti mismo.

 

 

 

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11 años atrás

 

Cuando Alex tenía siete años lo llevaste a una clase de prueba para aprender Karate, ya entonces Alex era demasiado delicado y afeminado, creíste que aprender a dar puñetazos y patadas mientras convivía con otros niños varones lo haría más masculino, pero Alex pasó toda la hora mirando la clase vecina.

Al lado del dojo de Karate de aquella plaza comercial en Daleville y dividido solo por una pared de vidrio se encontraba “BEAUTIFUL BUTTERFLYS BALLET”, una pequeña academia de ballet para niñas y adolescentes. Alex simplemente ignoró cada una de las órdenes del “SENSEI” y se quedó embobado mirando como saltaban, giraban y bailaban aquellas hermosas y delicadas niñas vestidas en leotardos rosas.

Cuando el distraído Alex recibió un golpe de uno de sus compañeros y su nariz comenzó a sangrar, el pequeño y delicado niño comenzó a llorar a gritos, tú estabas aterrado de llegar a casa con Alex sangrando y llorando, Hannah era muy sobreprotectora con su dulce niño, lo mimaba y trataba como a una pequeña princesa, si Alex le contaba que por tu culpa había sangrado, Hannah te lo haría pagar caro.

Cuando le prometiste a Alex qué harías cualquier cosa para que dejara de llorar y no le contara nada a su madre, Alex señalo con su pequeña manita la academia de ballet y entre sollozos dijo:

“¡Yo quiero hacer eso!”.

Trataste de explicarle que el ballet era solo para niñas, pero Alex no quería saber nada de eso, y se puso a gritar de nuevo. Por fin cediste e inscribiste al pequeño niño a la femenina y rosada escuela de ballet.

La hermosa y francesa profesora, Madame Papillon estaba encantada de recibir a Alex en su clase, y ese mismo día después de llamar a Hannah y contarle que Alex quería practicar ballet tu esposa transfirió encantada una gran cantidad de dinero a la cuenta de la hermosa profesora francesa, aquella pequeña fortuna cubría los tres primeros meses de colegiatura, siete juegos de ropa completos, ¡uno para cada día de la semana!, (al parecer Alex iría incluso los domingos a practicar), dos pares de zapatillas de ballet y otros accesorios, como listones, aros, y pelotas con las que las niñas practicaban las diferentes coreografías.

Madame Papillon, tomó medidas del cuerpo de Alex y anotó la talla de su calzado y te dijo que llevaras a Alexis el día lunes después de clases a las dos de la tarde.

Mientras caminabas de regreso a casa con un Alex que saltaba de alegría y emoción, trataste de convencerte de que tal vez el hecho de que tu hijo varón fuese a clases de ballet no fuese tan malo, tal vez lo que le atraía de esa clase eran las hermosas y delicadas niñas en leotardos y tutus rosas, y siendo el único varón de la clase, Alex tendría asegurado todos los papeles masculinos de las coreografías, por lo cual tendría acceso total a una docena de hermosas niñas con las que bailaría muy de cerca.

Pensaste que los juegos de ropa que la maestra le daría a Alex serian la versión masculina de lo que usaban las niñas. Pero, cuando el siguiente lunes después de recoger de la escuela a tu hijo, te presentaste, esta vez en compañía de Hannah, para ver la primera clase de ballet de Alex, te llevaste una gran sorpresa cuando la hermosa francesa le entregó a tu esposa siete ajustados leotardos rosas, siete pares de medias blancas, siete pares de calcetas cortas y siete pares de calcetas a medio muslo, todas con femeninos encajes rosados, tres pares de calentadores rosas, también le dio media docena de diademas, rosadas, plateadas y doradas, adornadas todas ellas con bonitas flores y mariposas rosadas o blancas, una pequeña tiara plateada con diamantes rosas de imitación y por ultimo hizo entrega de tres bonitas varitas con listones rosados de diferentes longitudes, dos bastones de porrista, rosas también, tres aros de silicón transparente con brillitos color rosa, y una pequeña pelota de caucho rosa del tamaño de un melón.

¡Maldita sea! ¡Todo era color rosa!

Hanna te miró extrañada y tú entre tartamudeos le explicaste a la profesora que Alex era un niño y que tú creíste que ella lo sabía.

Madame Papillon, abrió los ojos sorprendida y vio de nuevo al pequeño Alexis, y juró profundamente que pensó que Alexis era una niña.

“Con ese nombre, ese cabello rosado, y esas orejitas de elfo yo creí que… además usted sabía que esta academia es solo para niñas, lo dice muy claramente ahí”, señalo la marquesina que estaba arriba de la entrada.

Hannah y tú miraron, y si ahí debajo de las palabras “BEAUTIFUL BUTTERFLYS BALLET” escritas con unas cursis y muy femeninas letras rosa neón, decía claramente, “Academia de ballet y gimnasia artística para niñas”.

Miraste aterrado a Hannah quien simplemente te miró decepcionada y enojada pero no te dijo nada.

“Lo entiendo, fue mi culpa…”, tartamudeaste avergonzado, “¿podría devolvernos el dinero y cancelar la inscripción?”

Lo siento… No puedo devolverles el dinero… ya eh usado la mayoría para comprar los atuendos de su hijo, y como usted lo ha dicho fue culpa suya”.

Alex que había escuchado todo, comenzó a llorar amargamente, y Madame Papillon lo miró con ternura.

Hannah al ver a su niño bonito llorando trato convencer a la profesora de darle una oportunidad a Alex.

“Escuche Madame Papillon, entiendo que Alex es un niño, ¡pero vamos!, usted puede ver que es más bonito que la mitad de sus estudiantes, y por la fortuna que eh pagado al menos merece una clase, ¿verdad?”

La hermosa mujer francesa, miró enojada a Hannah, pero después de echar un vistazo a Alex que seguía llorando angustiosamente, su semblante se enterneció.

“Está bien, puede quedarse hoy, pero si no muestra empeño, disciplina o es desobediente, tendrán que marcharse sin rembolso alguno. ¿está de acuerdo?”

Madame Papillon miraba a Hannah, ambas se habían olvidado completamente de ti.

“Es un trato”, respondió Hannah y estrecho la mano de la profesora.

Hannah habló entonces con Alex y después ambos fueron a los vestuarios, cuando unos minutos después salieron, Alex se veía como una pequeña y hermosa niña, el ajustado leotardo abrazaba su delicado y pequeño cuerpo como una segunda piel, y sus largas piernas estaban enfundadas en sus medias blancas, sus pequeños y delicados pies calzaban con completa naturalidad las rosadas zapatillas de ballet, pero lo que completaba la transformación, fue su cabello rubio fresa peinado y sostenido por una bonita diadema plateada con una rosa blanca que descansaba sobre una de sus élficas orejas.

Si pensaste que el pequeño amiguito de Alex sobresaldría en aquel ajustado leotardo, te equivocaste completamente, su vientre y entrepierna lucían completamente planos, y cuando le preguntaste en un susurro a Hannah sobre ello, tu esposa simplemente dijo.

“Un pequeño truco femenino”, y guiñando el ojo no te aclaró nada más.

Madame Papillon también miró asombrada a Alex, que parecía una rosada hada del bosque.

Pronto comenzó la clase, y sorprendido viste como tu pequeño niño que había demostrado ser torpe y lento en la clase de Karate, ahora se movía con elegancia, y naturalidad, copiando cada movimiento de sus compañeritas y de su maestra casi al instante, cada saltito, cada paso, cada femenino movimiento de brazos y manos, Alex los repetía con facilidad y naturalidad, y cuando la profesora les ordenó practicar poses y estiramientos para gimnasia, descubriste que tu hijo era extremadamente flexible, podía estirar sus largas piernas en ángulos imposibles sin un solo gesto de dolor.

Pasaron dos horas practicando poses, saltos, estiramientos y volteretas, la profesora entonces puso música clásica y ordenó a Alexis ver a sus compañeras bailar una coreografía, el espectáculo era bonito, pero no perfecto, eran doce niñas de entre 5 y 13 años de edad.

La mayoría sabían lo que estaban haciendo, y un par de ellas se veían realmente espectaculares, pero tres o cuatro cometían muchos errores que la profesora corregía con voz fuerte y firme.

Cuando la música acabó y Madame Papillon les ordeno tomar posición de inicio una vez más, Alex se acercó dando femeninos saltitos, y tomo su lugar junto con las otras niñas, cuando la profesora le dijo que tal vez sería mejor que viera la coreografía un par de veces más, Alex que siempre había sido tímido y sumiso esta vez desobedeció y le dijo con su vos suave y aguda, pero llena de confianza que estaba listo.

Madame Papillon lo miró intrigada, y al final le permitió intentarlo.

La música de nuevo comenzó y para sorpresa de la francesa profesora, para tu propia sorpresa la de Hannah, y la de la media docena de madres que se quedaban a ver los ensayos de sus hijas, Alex repitió casi a la perfección la coreografía que había visto solo una vez.

Solo se equivocó un par de veces en las poses más complicadas, a comparación de las cuatro niñas que habías notado antes, que cometieron media docena de errores.

Cuando las jóvenes bailarinas terminaron la hermosa danza, todos se encontraban en silencio sorprendidos de cuan perfecto había estado Alex.

Fue la mismísima Madame Papillon quien comenzó a aplaudir eufórica y con lágrimas en los ojos se acercó al pequeño Alex y le dijo que era la primera vez que veía a alguien tan joven y tan talentoso, tan natural.

Y fue ella la que le rogó a Hannah que permitiera a Alexis quedarse, dijo que mientras se vistiera de niña y los demás padres no se enteraran de ello Alex debía asistir a su academia, un talento como el suyo se ve una vez en la vida, dijo emocionada.

Después de tres horas de duro entrenamiento Alex estaba bañado en sudor, pero con una enorme sonrisa en su elfino rostro, cuando regresó de las duchas, Hannah le pregunto si estaba dispuesto a vestir de niña para poder aprender ballet, Alex dando femeninos grititos de alegría dijo que sí.

Cuando tu quisiste opinar al respecto, alegando que tal vez no fuera lo más indicado vestir a tu hijo varón de niña y enseñarle a bailar ballet, Hannah enojada dijo.

“¡Fue culpa tuya!”.

Y el asunto quedó zanjado.

Y así desde los siete hasta los dieciséis años Alex practicaba tres horas diarias de ballet, vistiendo y bailando como niña, tú nunca volviste a asistir a uno de sus ensayos o a alguna de sus presentaciones, aún te sentías culpable del hecho de que tu hijo se disfrazara de niña para bailar ballet.

En realidad, Alex quería mantener en secreto sus clases de ballet asi que solo tú, Hannah y Chloe sabían sobre ello, para el resto del mundo Alex era un tímido y callado niño bonito que vestía ropa fea y holgada.

Siempre quisiste que lo dejara, y tu deseo desgraciadamente se cumplió, Alex dejó el ballet después de la sorpresiva muerte de Madame Papillon, la hermosa mujer francesa había muerto en un accidente aéreo.

Cuando Alex acababa de cumplir dieciséis años, Madame Papillon había volado a Francia para visitar a su familia… el avión se había desplomado a causa de una avería en los motores, Alex lo había tomado muy mal, y desde entonces su timidez se había agravado.

Alex que siempre fue sumiso, callado, y tímido, pero alegre, se había vuelto retraído, huraño y depresivo.

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En la actualidad Alex está a unos cuantos días de cumplir 18 años. Su cuerpo es delgado, pero siempre usa grandes sudaderas con capucha más allá de su trasero que son casi vestidos con lo largas que son, es como si quisiera esconder sus largas piernas, sus estrechos hombros, o algo más, con la capucha de la sudadera ocultaba ese cabello rosado de fantasía y sus orejas puntiagudas de elfo.

Vistiendo en blanco y negro, Alex parecía adoptar cada día más y más un estilo gótico o emo, Hannah y Chloe trataban por todos los medios animarlo, incluyéndolo en sus salidas y planes, llevándolo de compras y al cine, pero Alex no parecía estar reaccionando, creíste que el mudarse a una nueva ciudad lo animaría pero no había sido el caso, Alexis había pasado todas las últimas vacaciones de verano encerrado en su cuarto, escuchando música rock a todo volumen, y solo saliendo para comer e ir al baño, Chloe que había pasado su verano en la playa con la familia de Emily, había invitado a su hermanito a acompañarla pero Alex simplemente no tenía las energías ni el ánimo para ir a una soleada y ajetreada playa.

Hannah y tú tenían trabajo que hacer asi que este año no habían ido a ningún lugar, pero estaban planeando unas vacaciones familiares a las montañas en invierno.

Era obvio que Alex estaba pasándola mal, era obvia  la depresión por su amada maestra de ballet, quien lo había adoptado como su estudiante favorito, y estaba claramente acomplejado por su físico, y tú como su padre te sentías culpable de todo ello, le habías heredado tu propio cuerpo, pequeño y delgado, también tu lindo rostro de niño bueno nada varonil, y si nunca lo hubieses inscrito a clases de ballet por equivocación, Alex no estaría sufriendo por la muerte de su querida Madame Papillon, era tu culpa que Alex estuviese deprimido y era tu culpa que fuera tan femenino, tanto en sus amaneramientos como en su físico.

Un día tú mismo le propusiste inscribirlo en una nueva academia de ballet el pequeño y delicado niño blanco corrió a su cuarto y lloró toda la tarde, después de eso nadie había hablado del ballet de nuevo.

“Hola papá”, dice con esa dulce delicada y suave voz, a ti siempre te llama papá, pero a Hannah la llama mami, siempre te has preguntado por qué, pero no es importante. “Parece que ustedes dos tuvieron una noche realmente agradable”.

“Uh… Sí, fue divertido”, contestas mientras te sientas.

“¡Claro que lo fue!”. Hannah deja un plato de desayuno con un guiño y se vuelve hacia el fregadero mientras ves como su gordo y redondo trasero de burbuja rebota un poco mientras se aleja, de nuevo está usando uno de sus disfraces de maestra sexy, bueno, no son disfraces, pero bien podrían serlo, no importa que ropa use Hannah todo le queda como si fuese un disfraz sexy de Halloween.

Hannah parece pensar que la diversión fue mutua, pero a tu parecer fue todo lo contrario. La recuerdas masturbándose figurativa y literalmente para otro hombre mientras tú te sentabas y mirabas como un extraño.

La recuerdas repitiendo los diálogos de Linda mientras ambas mendigaban por aquella enorme verga negra.

“Bueno, gracias por el desayuno mami. Voy a subir a mi habitación, probablemente veré esa película más tarde”. Y con eso Alex subió las escaleras caminando delicadamente sobre la punta de sus pies y contoneando sus caderas de forma suave y natural, sus manos dobladas femeninamente como si estuviera en una pasarela.

Hannah mira preocupada a Alex y después de lanzar un suspiro se sienta a comer ella misma, normalmente ustedes dos hablarían durante el desayuno, pero hoy su rostro está enterrado en su teléfono. Sus labios regordetes dibujan una leve sonrisa y un ligero rubor cubre su rostro, tú puedes adivinar lo que está mirando.

Hacia el final de un desayuno tranquilo donde los únicos sonidos en la habitación eran de tenedores raspando platos y los sonidos de las uñas de Hannah golpeando su teléfono, tu hija Chole entra con su amiga Emily.

“¡Hola mamá, hola papá!”.

Ves a tu hermosa y dulce hija entrar a la cocina dando alegres saltitos al caminar, lo cual provoca que sus enormes pechos doble D reboten sensualmente.

Si Alex heredó la belleza y los ojos de su madre, Chloe había heredado el sensual cuerpo de Hannah, su piel blanca y sedosa, pero ligeramente bronceada, hacía resaltar su largo cabello ondulado, castaño oscuro, que le llegaba hasta enormes pechos, suficientemente largo para cubrir sus pezones.

El rostro de Alex era femenino, lindo y tierno, el hermoso rostro de Chloe era hermoso pero sensual, con pómulos altos, una perfecta y pequeña nariz, labios rojos y llenos, aunque no tan hinchados y gordos como los de su madre y su hermano, una barbilla distinguida y femenina, cejas perfectamente delineadas, y unas pestañas rizadas cargadas de rímel hacían resaltar sus hermosos ojos azules, azul mediterráneo, el único rasgo que heredó de ti.

Sí, su rostro era bello y elegante, casi aristocrático, pero era demasiado sensual, uno de tus compañeros del trabajo había dicho en la última fiesta de navidad que Chloe se parecía a Sasha Gray, la famosa actriz porno, y aunque odiabas admitirlo, tenía razón, el hermoso rostro de tu niña era casi idéntico.

Pero no era solo su rostro lo que más recordaba a una estrella porno, no, era su increíblemente sexy cuerpo, Chloe era alta, aún más alta que su madre, con 1.80 de alto Chloe te superaba por diez centímetros, y siempre te hacía sentir incomodo mirarla hacia arriba, ella tenía que agacharse cada vez que te daba un beso de despedida, lo cual te humillaba de sobremanera.

Pero la altura de Chloe no la hacía parecer flacucha y huesuda como a muchas mujeres altas, no, su altura era bien disimulada gracias a las extremas curvas femeninas que adornaban su joven cuerpo, a sus veintiún años Chloe tenía un par de largas y bien torneadas piernas que parecen durar para siempre, sus muslos gruesos y bien torneados terminan en unas anchas caderas que sostenían un par de nalgas redondas y suaves pero firmes, un pequeño pero perfecto culo en forma de corazón, que se ve más grande gracias a su delgadísima cintura, Chloe tiene la cintura más estrecha que jamás has visto.

Hannah siempre ha envidiado esas pequeñas pero perfectas nalgas de burbuja de Chloe, Chloe a su vez desearía tener el gordo e inmenso culo de su madre. Cosas de mujeres.

Pero si Hannah no le ha heredado a su hija su inmenso culo en forma de durazno si le dio un par de pechos redondos, enormes y firmes del tamaño de melones maduros, los jóvenes senos de tu hija son talla “DD”, casi “EE”, eran inmensos, tan grandes como su cabeza.

Siempre te has alegrado de que tu hija sea una buena niña, porque, aunque Emily es dos años más joven que Chloe es más salvaje y traviesa que ella.

No es que tu niña sea tímida y sumisa como Alex, Chloe es por derecho propio una fuerza a tener en cuenta, es alegre, vivaracha, valiente y decidida, pero al ser criada por Hannah y su abuela, ambas unas recatadas y modestas mujeres católicas, Chloe creció para ser una niña buena, es educada, obediente, viste modestamente, tiene las mejores notas en el colegio, y siempre está ayudando a su madre y a su hermanito.

El tiempo que no usa para estudiar y ayudar en casa lo pasa en las canchas de tenis de su universidad, dos horas diarias han bronceado su blanca piel dándole una apariencia sexy y saludable.

Justo ahora está vistiendo un ligero vestido de verano color azul, lo que resalta sus ojos, el vestido aunque juvenil y bonito llega casi hasta sus tobillos, calza unas bonitas sandalias de corcho con un tacón de dos pulgadas y aunque el atuendo es bastante modesto e inocente, la parte superior de este amenaza con explotar en cualquier momento, los inmensos pechos de Chloe están poniendo a prueba su sostén y la ligera tela de su vestido, y aunque tu hija solo está mostrando sus delgados brazos desnudos y el vestido tiene muy poco escote, es imposible no notar cuan sexy luce tu hija con ese gigantesco par de pechos.

Agradeces que Chloe sea una buena niña católica, no sabes lo que harías si ella fuese como Emily.

Y hablando de Emily.

“¡Hola Sra. Smalls, Sr. Smalls!”, saludó Emily.

Emily era una pequeña rubia que en realidad era un poco más joven que Chole, era una estudiante de último año de preparatoria, tenía dieciocho años, y sin embargo ella es quien mandaba en el dueto de amigas, es la hermosa y pequeña Emily quien decide cuando y a donde ir, y que es lo que harán.

Emily es una rubia de playboy, es linda como un pequeño conejito, con 1.72mts de altura es más alta que tú solo por dos centímetros, su cabello rubio dorado cae lacio hasta su diminuta cintura y a pesar de que todavía tiene un lindo culo redondo y firme y un par de pechos copa C, parece una ramita al lado de Hannah y Chloe, pero cualquier mujer parece delgada y flaca al lado de tu esposa e hija, ambas tenían esas curvas exageradamente sensuales que las hacían parecer estrellas porno.

La piel blanca como la leche de Chloe es sedosa y suave gracias a los innumerables tratamientos de belleza que hace cada semana. Su vientre es plano y sexy, sus piernas largas y torneadas, y sus pequeñas pero firmes nalgas delatan las horas que pasa en el gimnasio.

El rostro de Emily se parece al de una Barbie, ella posee una boca grande de labios gruesos e hinchados, Chloe te ha confesado que son falsos, Emily se inyecta colágeno en los labios, te parece gracioso que esa jovencita rubia tenga que recurrir a un cirujano para conseguir que sus labios se parezcan a los de tu esposa… pero deja de ser divertido cuando recuerdas que los labios de tu hijo varón lucen aún más sexys que los de esta niña rubia.

Una pequeña y respingada nariz adorna el bonito rostro de muñeca de Emily, sus cejas perfectamente depiladas enmarcan unos ojos azul grisáceo, sus pestañas son rizadas y bonitas, no son tan largas ni tan rizadas como las de Alex, pero en realidad nunca has visto unas pestañas más largas y rizadas que las de tu hijo.

En resumen, Emily es una hermosa, sexy y presumida rubia completamente cliché, ¡incluso es la capitana de la escuadra de porristas, por el amor de Dios!

Lo realmente preocupante de Emily es que sabe lo sexy y hermosa que es, y no pierde oportunidad en demostrarlo.

Ahora mismo está vistiendo unos apretado y muy cortos shorts de mezclilla blanca que dejan a la vista de cualquiera sus blancos y lechosos muslos, y un par de zapatillas blancas de plataforma con tacones de cinco pulgadas hacen que sus piernas y su pequeño culo llamen la atención de cualquiera. Su plano vientre esta al descubierto, pues está usando un pequeño top de manga larga con un escote enorme que deja ver el canal entre sus pequeños pechos, no está usando brasier y puedes ver la sombra de sus pequeños pezones debajo de la fina tela blanca.

Emily se viste y actúa como una puta, alegre, coqueta, y sexy. No pierde oportunidad para resaltar sus encantos femeninos, posa y se mueve para que sus pequeños pero alegres pechos y su apretado y perfecto culo siempre estén a la vista.

Emily se hizo amiga de Chloe y Alex cuando tu bonito hijo entró a su nueva escuela hace un año, en general parece buena chica, tal vez demasiado coqueta, te preocupa que comience a influenciar a Chloe, pero no tienes el valor de decir nada, Chloe se ve feliz a su lado, Hannah cree que Emily es fabulosa, e incluso Alex la adora.

Y hablando de Alex.

“¡Hola Alex!”, dicen las dos hermosas chicas y te das cuenta de tu delicado y bonito hijo ha regresado, esta vez vistiendo sus típicos jeans negros y una enorme sudadera blanca con un tierno gato negro de caricatura estampado en el frente.

“Hola”, Alex responde con su delicada voz, “solo bajé por un poco de agua”. Se disculpa como si hubiese hecho algo malo.

“¡Hey chicas!”, Hannah dice emocionada mientras se levantaba para abrazar a Chloe y Emily.

Hannah deja su teléfono boca arriba sobre la mesa y una vez más el semental negro de la película de anoche está en la pantalla.

“Oh, ¿Qué está mirando Sra. Small?”. Emily pregunta descaradamente.

“¡Oh, no es nada!”, dice Hannah juguetonamente con un fuerte rubor en las mejillas. “Es solo este actor de la película que Jerry y yo vimos anoche! Él… él fue realmente genial, y he estado buscando otras cosas en las que él ha estado”.

“¡Déjeme ver!”, Emily insiste alegremente, “¿Oh, Jarrad Christensen? ¡LO AMO! ¿estás hablando de su nueva película RESCUE LOVE?” 

“¡Sí! ¡Una de las mejores películas que he visto en mi vida! ¡Busqué información sobre la película, y encontré la página de la casa productora! ¡Se llama A.C.E.! ¡Y por lo que leí es una productora de cine artístico independiente, enfocada en promover los actos de reparaciones y la reivindicación de la raza negra! ¡anoche leí su manifiesto, y me encanta toda la idea, aunque no se si la entiendo por completo!”, Hannah casi grita.

“¡Oh por Dios! ¡eso es grandioso! ¡se nota que Jarrad te dejo muy impresionada!” Emily aplaude contenta, “¡Tienes razón, A.C.E. es una productora de cine erótico racialmente artístico, y tiene como objetivo principal el promulgar la verdad sobre la raza negra, y dejar en claro cuál es el lugar correcto y natural de la raza negra superior!”

“¿De que hablan ustedes dos?”, Chloe mira algo enojada a su amiga y a su madre que ahora parecen mejores amigas.

“¡Oh querida! ¡solo hablamos de la maravillosa película que tu padre y yo vimos anoche!”, Hannah suspira emocionada, mientras recuerda embelesada la noche anterior, “es una película estupenda, una historia tan hermosa y romántica! ¡Y el actor principal, Jarrad Cristiansen es un sueño! ¡Tú y tu hermano deben verla, estoy segura que van a amar a Jarrad!”

Chloe mira intrigada la pantalla del celular de su madre, y un rubor cubre sus mejillas al ver al enorme y musculoso macho negro.

“¿Sabías que él y otros actores negros trabajan para la productora A.C.E.? ¡Todas las películas producidas por ellos tienen como protagonistas apuestos y sexys hombres negros!”. Emily informa a Hannah con voz emocionada, “¡Yo he visto todas sus películas como… no se… unas diez veces cada una!”

“¿En serio?”, pregunta Chloe intrigada, “¿Por qué nunca me has mencionado que ves películas eróticas protagonizadas por hombres negros?”

Emily sonríe apenada.

“Bueno… pensaba mostrarte alguna de esas películas pronto, pero… no sabía cómo reaccionarias, pero ahora que sé que a tu madre le interesa la ideología de A.C.E. ¡es mi deber guiarlas en el hermoso mundo de la justicia racial, los actos de reparación, y la superioridad negra!”, Emily muestra una sonrisa traviesa y algo malvada. “¡Como dije, les mostrare mi colección de películas de A.C.E. casi tengo la colección completa!”

Y por alguna razón te estremeces de miedo, no te gusta nada de lo que la pequeña rubia está diciendo, ¡justicia racial? ¿actos de reparación? ¿superioridad negra?

“¿Es eso cierto?”, pregunta Hannah emocionada, “¿Jarrad actúa en alguna otra película como RESCUE LOVE?”, sus hermosos ojos grises brillas de emoción.

“¡Por supuesto que actúa en más películas de A.C.E.!”, Chloe responde con una sonrisa traviesa en sus bonitos labios, “¡Jarrad es uno de sus actores más famosos, ha protagonizado como cien de las películas de A.C.E., y la colección completa consta de más de quinientas películas hasta ahora!”

Tu casi escupes el café, acabas de enterarte de que la amiga de tu hija, quien tiene dieciocho años, ve películas porno donde hombres negros follan hasta la locura a hermosas mujeres blancas, sin censura alguna.

Es más, caes en cuenta de que Emily ha visto a Jarrad protagonizando decenas de películas como la que tú y Hannah vieron anoche, lo que significa que ha visto la enorme verga negra de doce pulgadas de Jarrad.

No sabes cómo sentirte al respecto si bien es verdad que Emily es mayor de edad, también es verdad que no te gusta pensar en la pequeña y rubia Emily masturbándose mientras ve a musculosos machos negros con enormes vergas negras, follando salvajemente a sexys mujeres blancas.

“¿Es él de quien me has estado hablando mami?”, pregunta curioso Alex y de nuevo esta parado sobre la punta de sus pies, pero esta vez para tratar de ver el celular que tiene Hannah en la mano.

“¡Es él Alex, tan solo míralo!, ¿no es acaso un sueño?”, ves como tu esposa le muestra la foto del musculoso semental negro semidesnudo a tu delicado hijo.

Alex simplemente abre sus hermosos ojos de cierva al máximo y su pequeña boca de labios regordetes se abren en una expresión de asombro y deleite.

“¡Oh mi Dios!, ¡Él es… él es… hermoso… es perfecto!”, Alex dice entre suaves y delicados gemiditos de asombro, sus enormes ojos grises siguen abiertos tratando de devorar con la mirada al negro macho alfa de la foto, y puedes ver como sus lindas mejillas de porcelana se tiñen de rojo cuando Alex se sonroja violentamente.

“¡Lo es! ¡Es tan perfecto!”, Hannah da saltitos emocionada como una colegiala.

“Debo admitir que es muy apuesto, y muy grande”, Chloe esta ruborizada y se abanica su hermoso rostro con su mano para enfatizar lo caliente que la hace sentir Jarrad.

“Estoy bastante segura de que ahora está saliendo con la actriz de RESCUE LOVE, ¿Cómo se llamaba? Anna Heather o algo asi”. Emily dice animada.

“Oh, eso me hace tan feliz, ¡se veían tan perfectos juntos!”, Hannah responde.

“Sí, son totalmente perfectos el uno para el otro. Fue un poco escandaloso porque Anna Heather estaba casada con un patético niño blanco cuando filmaron la película y hay rumores de que Jarrad la dejó realmente embarazada durante la filmación. Sin embargo, nadie la culpa, quiero decir, ¡míralo!”. Emily se apaga soñadoramente y las cuatro chicas blancas… te corriges, tres chicas blancas y un lindo y afeminado niño blanco, se toman un momento para admirar la pantalla del teléfono de Hannah.

“No he visto RESCUE LOVE todavía, pero siento que lo necesito ahora”. Dijo Emily con una sonrisa maliciosa.

“Podríamos verla más tarde si ustedes chicas quieren, solo tengo que correr a la tienda un momento”. Hannah dijo rápidamente.

“¡Claro que queremos!”, Chloe y Emily dicen al unísono.

“¡Yo también quiero verla!”, murmura tímidamente Alex, el pequeño niño rubio está de pie con las manos entre sus muslos meciéndose tímidamente esperando ser incluido.

“¡Veo que Jarrad también te ha flechado hermanito!”, Chloe acaricia el rosado cabello de Alex despeinándolo, ella es más alta.

“¡No!, yo… no… él… no… yo… solo quiero ver la película por la historia, mami dice que es muy romántica…”, Alex tartamudea de la misma manera que lo haces tú, pero en él, ese nerviosismo y torpeza lo hacen parecer lindo y adorable y no tonto y patético.

“¡Oh vamos, Alex! ¡cualquier linda niña blanca se enamoraría a primera vista de Jarrad Christensen! ¡y tú eres la niña más linda y más blanca que yo conozco!”, Emily se ríe mientras se burla de Alex.

Hanna y Chloe se ríen histéricamente, mientras Alex se cubre su bonito rostro con las largas mangas de su sudadera. Sus hermosas facciones de elfo están completamente coloreadas en rojo por la vergüenza.

Hannah y Chloe dejan de reírse y abrazan a Alex mientras lo consuelan.

“Créeme Alex si Jarrad te ha impresionado con solo una foto, cuando lo veas en acción vas a enamorarte”. Hanna le dice en voz alta a tu hijo, animándolo, y tú no puedes creer lo que escuchas. “¡Podrás ver a Jarrad Christensen en toda su gloria!, es una película artística erótica, vas a disfrutar mucho de la historia, pero también de las escenas calientes, ¡sé que yo las disfruté!”, Hannah lanza una risita tonta mientras se ruborizaba al recordar la noche anterior.

No has dicho una palabra durante lo que parece una eternidad mientras tu cocina se llena de hermosas chicas blancas que babean sobre este semental negro frente a ti, olvidándose de ti.

Pero al comprender que tu sexy y hermosa hija y tu delicado y afeminado niño verán pornografía interracial algo en ti se reverla y decides hablar.

“Hannah cariño, no crees que esta película es demasiado explicita para nuestros hijos, tiene escenas muy violentas y no creo que sea buena idea que vean pornografía…”, pero tu queja es interrumpida por dos femeninas voces furiosas.

“¡No es pornografía! ¡es cine racialmente erótico!”, Hannah, y Emily gritan indignadas.

Tu retrocedes asustado y te vuelves a sentar, intimidado por estas dos hermosas mujeres.

“¡A.C.E. es una productora de cine artístico racialmente erótico que se enfoca en filmar historias de empoderamiento racial y relaciones eróticas y afectivas interculturales, para promover la supremacía de la raza negra y los actos de reparación de la raza blanca para con los hombres negros, quienes fueron esclavizados durante siglos!, ¡Cualquier acto de violencia o venganza contra el hombre blanco en esas películas está justificado y los actos de sumisión sexual por parte de las niñas de raza blanca hacia los hombres superiores negros son casi obligatorios en todas las filmaciones!, ¡Por lo cual si hay escenas de sexo explícito entre un hombre de verdad, un hombre negro y una niña blanca o un pequeño y lindo femboy blanco debe ser tomada como un ritual de reparación para la raza negra y no como un vulgar acto sexual! ¡No hay nada de pornográfico en ninguna de las películas producidas por A.C.E.! ¡¿quedó claro?!”. Aquel discurso lleno de palabras complicadas y filosofía racial salió de la bonita boca de Emily como si de los diez mandamientos se tratara.

Tú simplemente te quedaste con la boca abierta, asustado por la fiereza con la que Emily defendió la película y la casa productora que realizaba dichas películas, preguntándote que diablos significaban palabras como femboy, actos de reparación, y sumisión sexual, y si habías escuchado bien, Chloe había dicho, ¿supremacía negra?

Hannah, Chloe y Alex aplaudieron emocionados y sonrientes.

“¡Eso es chica! ¡Que se escuche tu rugido!”, Chloe felicitó a su mejor amiga.

“Yo apenas ayer encontré la página de A.C.E., tan solo leí un poco de su manifiesto, pero estoy completamente de acuerdo, RECUE LOVE, no es pornografía, es una obra de arte que habla sobre lo hermoso que es la unión de dos razas, por cierto, ¿Qué significa A.C.E.? Creí que se refería a las cartas inglesas”. Hanna pregunta emocionada de tener a Emily para guiarla, quien parecía ser una experta en el tema.

“¡A.C.E. son las siglas para AFRICAN CULT EDEN! A.C.E. es una productora cinematográfica subsidiada por el partido demócrata como una manera de pagar reparaciones a los hombres negros. Las películas de A.C.E. se enfocan en dar el mensaje de justicia racial y actos de reparación de la raza blanca para con los hombres reales, los hombres negros. ¡Sus hermosas y románticas películas difunden el necesario y verdadero mensaje de amor y unión entre las mujeres blancas y los hombres negros! ¡Las hermosas historias que cuentan las películas de A.C.E. promueven la atracción natural entre las niñas blancas y los machos negros superiores! ¡Es genial que usted comprenda la misión de A.C.E.!”. Emily estaba emocionada por encontrar una nueva compañera para su causa.

“¿Amor entre los hombres negros y las mujeres blancas?”, Alex gimió decepcionado y genuinamente triste, “¿Solo mujeres blancas?”, preguntó suavemente.

Emily se giró hacia el hermoso y pequeño niño rubio y sonriendo de manera casi maternal abrazó a tu bonito hijo.

“¡Oh Alex! ¡No tienen por qué sentirte triste! ¡Por supuesto que las películas de A.C.E. no solo promueven el amor interracial entre sexys niñas blancas y fuertes machos negros! La productora A.C.E. está comprometida en promover los actos de reparación de la raza blanca, y el mejor y más valioso acto de expiación que un bonito y delicado niño blanco como tú puede realizar, es renunciar a su débil y patética masculinidad y entregar su cuerpo, su mente y su corazón a un fuerte y poderoso macho negro para ser feminizado y usado como esclavo de la raza negra. ¡Hay al menos cien películas que se centran en el amor entre poderosos machos africanos y delicados y bonitos Sissyboys como tú! ¡Y la mitad de esas películas están protagonizadas por Jarrad Christensen!”.

Alex se sonroja mientras una enorme y hermosa sonrisa se dibuja en sus gordos labios de puta.

“¿Sissyboy? ¿Jarrad ha hecho películas eróticas con Sissyboys como yo?”. Tú lindo hijo pregunta emocionado, su hermoso rostro de hada está completamente sonrosado, y sus hermosos ojos grises brillan con esperanza y anhelo.

“¡Oh por Dios Alex! ¡Trata de disimular un poco! ¡Todos sabemos que estás completamente enamorado de Jarrad! ¡Pero trata de controlarte pequeña niña traviesa!”. Chloe se burla de su hermanito quien avergonzado se esconde detrás de las gruesas y largas mangas de su sudadera.

“¡No tienes nada de que avergonzarte Alex! ¡Es normal que un bonito y femenino niño blanco como tú… un lindo y delicado sissyboy como tú se enamore perdidamente de un macho alfa negro como lo es Jarrad Christensen! ¡No ere ni el primero ni el ultimo putito que se vuelve loquito por uno de los actores negros de A.C.E.! ¡Yo solo tengo media docena de películas de amor erótico entre enormes y poderosos machos africanos y pequeños niños blancos como tú! ¡Por supuesto te prestaré todas ellas! ¡La mitad están protagonizadas por tu amado Jarrad!”. Emily continúa abrazando y animando a Alex, quien simplemente no puede contener ni su emoción ni su sonrisa.

“¡¿De verdad?! ¡¿De verdad me prestarías tus películas?! ¡¿De verdad me prestaras las películas donde Jarrad está follan… está amando a pequeños y bonitos niños blancos?”, El bonito niño de rosados cabellos esta tan extasiado ante la idea de ver aquellas películas de sexo interracial que su voz ya de por si aguda amenaza con volverse casi inaudible.   

“¡Por Dios, Alex! ¡estas a punto de orinarte encima! ¡Contrólate niña!”, Chloe de nuevo se ríe y se burla de su emocionado hermanito.

“¡Chloe! ¡Cariño! ¡No te burles de Alex! ¡Emily tiene razón! ¡Es natural que un pequeño niño blanco tan delicado y femenino como mi Alex se enamore locamente de un hombre tan fuerte, poderoso y negro como lo él Jarrad! ¡Alex sé un buen niño y dale las gracias a Emily!”. Hannah como siempre defiende y mima a su niño especial.

“¡Gracias! ¡Gracias! ¡Gracias Emily! ¡Te prometo que cuidaré de tus películas!”. Alex está dando femeninos y emocionados saltitos mientras abraza a su rubia amiga.

“¡Maldita sea Emily!¡¿Por qué nunca me constaste nada sobre A.C.E.?! ¡¿Por qué nunca me has prestado a mí ninguna de esas asombrosas películas de arte erótico?! ¡Creí que éramos amigas!”, Chloe se cruza de brazos fingiendo estar enojada, lo cual provoca que sus gigantescos pechos destaquen obscenamente.

“¡Lo siento niña, de verdad lo siento! Pero como dije, no sabía cómo reaccionarias si te contaba sobre los actos de reparación y la superioridad negra”, Emily abraza a tu tetona hija y se disculpa en tiernos susurros, “¡Ahora que sé que las tres reconocen a un hombre real cuando lo ven, les aseguro que les mostraré todo lo que sé sobre los actos de reparación, la culpa blanca, la justicia racial, y la supremacía negra!”

Chloe sonríe y abraza a su amiga rubia de vuelta, ahora todo está perdonado.

“¡Está decidido, hoy tengo que ir a la oficina por algunos papeles, y después pasaré al supermercado… Pero si quieren, esta noche podremos ver la película juntas”, Hannah dice mientras toma su bolso y sale de la casa, y notas con amargura que tu esposa tiene un pequeño y emocionado rebote en sus pasos.

“Está bien, quiero pasar todo el día aprendiendo más sobre A.C.E. los actos de reparación y la superioridad de los hombres negros… vamos a esperar a que vuelvas en mi habitación, ¡vamos Emily tienes mucho que enseñarnos a Alex y a mí! ¡Venga hermanito sé que tú también quieres aprender a ser un buen niño blanco!”. Chloe dice mientras los tres saltan a la habitación de Chloe, notas como Alex camina aún más femeninamente que Chloe y Emily, todo el tiempo sobre la punta de sus pequeños pies, un pie delante del otro, contoneando sus caderas, y con sus bonitas y pequeñas manos dobladas a la altura de la cintura, es como si cada gesto femenino natural para las chicas, Alex lo exagerara al límite, para ser más femenino que la más femenina de las mujeres.

“Ok. Ok. ¡No te enojes! Les enseñare la página oficial de A.C.E. y les explicaré toda la ideología sobre la supremacía negra”. Emily trata de calmar a su amiga mientras los tres niños suben las escaleras.

Y de repente te encuentras solo en la cocina sin un solo adiós, para limpiar el desayuno.

 

 

 

 

 

 

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