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♥“Jerry” domingo 11 de octubre ♥♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥♠♥
Son las nueve de la mañana y estás desayunando junto con tu esposa y tu hija.
Alex no ha bajado aún, aquello es bastante normal por parte de tu hijo, pues desde que su maestra de ballet murió, Alex siempre se levanta tarde debido a su depresión. Quieres creer que esa es la causa de su tardanza.
Pero bien sabes que la verdadera razón por la cual tu lindo y afeminado hijo no ha bajado a desayunar es porque se desveló la noche anterior.
Lo sabes porque anoche te despertaste en la madrugada sobresaltado por una horrible pesadilla donde tres enormes bestias negras te perseguían a ti y a tu familia a través de la selva para devorarlos.
Eran pasadas las tres de la madrugada cuando te levantaste sudando frio y con un grito mudo atorado en la garganta. Hannah estaba a tu lado durmiendo plácidamente con una sonrisa en su hermoso rostro.
Después de calmarte y recuperar la respiración decidiste bajar a la cocina por un vaso de agua, o tal vez algo más fuerte, aún puedes recordar aquellos tres horrendos, y gigantescos monstruos de piel negra que rugían y corrían detrás de ti.
Mientras caminabas por el pasillo del segundo piso te diste cuenta que la puerta del cuarto de Alex estaba de nuevo entreabierta y de nuevo femeninos y sensuales gemidos, jadeos y maullidos de placer escapaban del interior. Por un momento pensaste en dar la vuelta y regresar a tu cama, pero de verdad tenías sed así que continuaste caminando, y odiándote por ello te asomaste al interior del cuarto, donde pudiste ver a tu hijo varón recostado en su cama vistiendo uno de aquellos conjuntos de lencería que había comprado esa tarde.
Alex estaba masturbándose, pero a diferencia de cualquier adolescente varón, tu hermoso hijo no estaba jalando su pene, no, en cambio, Alex estaba dándose placer metiendo sus delgados y bonitos dedos dentro de su rosado húmedo y estrecho anito.
Ahí estaba tu hijo varón, vistiendo un sexy conjunto de lencería y dándose placer de la manera en que lo haría una mujer.
Tu hijo está mirando algo en la televisión y te das cuenta de que es otra de aquellas horribles películas pornográficas protagonizada por Jarrad Christensen.
Como siempre una mezcla extraña y caótica de sentimientos y sensaciones te invaden, te sientes furioso y asqueado por ver cómo afectan a tu hijo los hombres negros, también te sientes avergonzado por tener un hijo tan marica como Alex, y eso te hace sentir culpa, pues quieres pensar que tú eres muy moderno y de mente abierta. Y por debajo de todo eso puedes sentir incluso un poco de excitación, pues no puedes dejar de notar lo absolutamente sexy y pornográfico que luce el femenino cuerpo de tu hijo varón enfundado en esa lencería tan fina y costosa.
Estuviste mirando como Alex se dedeaba hasta que se retorció en un femenino orgasmo anal, su micro pene nunca disparó fajos de semen como lo haría un muchacho normal, el diminuto y rosado penecito de tu hijo simplemente babeaba un líquido transparente y aguado.
Alex descansó solo un par de minutos y comenzó a masturbarse de nuevo, todo el tiempo gimiendo y lloriqueando como un mariquita mientras susurraba el nombre de su BLACCK DADDY y de Jarrad Christensen.
Te alejaste de ahí casi corriendo antes de tener una vergonzosa erección por ver al marica de tu hijo comportarse como una putita.
Ahora al recordar aquellas vulgares imágenes de tu hijo penetrando su rosado anito con sus delgados dedos tu apetito se esfuma y asqueado alejas tu plato de ti.
“Alex está tardando mucho esta mañana”. Chloe murmura sin levantar la mirada de la pantalla de su celular.
“Ayer fue un día muy emocionante para él, supongo que mi niño estará muy cansado”. Hannah defiende a su niño especial como siempre, y al igual que su hija sus ojos no se apartan de su celular. “En realidad estoy muy contenta por el nuevo rumbo que ha tomado la vida de Alex, desde que su BLACK DADDY lo besó tan románticamente aquella noche, Alex se ve tan absolutamente radiante, no lo había visto tan feliz desde hacía mucho tiempo. Creo sinceramente que ahora que Alex se vestirá y comportará como la mujercita que siempre ha sido será mucho más feliz”. Hannah suspiró contenta.
“Debemos agradecerle a Emily por esto. Si ella no nos hubiese hablado de los movimientos para apoyar a la raza negra y no nos hubiese invitado al partido del viernes, Alex no habría sido reclamada por su BLACK DADDY”. Chloe por fin deja de mirar su celular y comienza platicar más seriamente con du madre.
Tú simplemente escuchas en silencio dando pequeños sorbos a tu taza de café, y como siempre te preguntas si acaso es posible que estés soñando, o que te hayas vuelto loco, pues es increíble la naturalidad con la que tu hija y tu esposa hablan sobre cómo es bueno y deseable que Alex se transforme en la pequeña puta marica de un maduro macho africano.
“Emmm… Hannah querida, mi madre te envía saludos… ayer en la mañana estuve charlando con ella y me ha dicho que tal vez venga a visitarnos pronto, al parecer quiere ver la gran manzana. ¿no es genial?” Tratas de llamar la atención de las dos hermosas mujeres y evitar que siguieran hablando de Alex y su nueva vida como marica.
“¿La abuela quiere venir a Nueva York?” Pregunta curiosa Chloe. “Eso es bueno, a lo mejor está pensando alocarse un poco… ella es tan remilgada, severa y DEMASIAAADOOOO religiosa. Si viene trataré de enseñarle a relajarse un poco, seguro que le encantará salir a pasear un poco, ¡e incluso podría llevarla a un bar o a alguna fiesta!” Chloe exclama emocionad mientras imagina excéntricos planes con su abuela.
Hannah por su lado hace una mueca de disgusto, tú tratas de ignorar las señales de que tu sexy y hermosa esposa odia y desprecia a tu madre completamente.
“No sé si sea buena idea invitar a tu madre a la casa Jerry. Alex está comenzando su transición a su nueva vida. Si tu religiosa y loca madre viene seguramente tratará de detener la feminización de Alex y tratará de lavarle el cerebro con sus sermones sobre Dios, pecados y el infierno… No, definitivamente no es buena idea que ella venga… Te prohíbo invitarla hasta que yo decida que es buena idea”. Hannah te ordena con esa voz fría y cruel que últimamente usa para hablarte.
Tú quieres decirle que eso no es justo, quieres decirle que eres tú quien compró el departamento y eres quien paga todo en esa familia, y que si tú quieres que tu madre los visite, eso es lo que va suceder… pero por supuesto no dices nada, no tienes el valor de hacer aquello, eres demasiado débil y cobarde parta enfrentarte a una mujer tan hermosa sexy y segura como lo es Hannah, además de que siempre has tenido el miedo de que si haces enojar a Hannah demasiado ella bien podría divorciarse de ti y alejarse para siempre.
¡No podrías resistir si aquello sucedía!
Así que como siempre te quedaste en silencio.
Tu atención entonces se fija en la pantalla del celular de tu esposa, Hannah está sentada al lado tuyo y ni siquiera trata de ocultar la pantalla así que tienes vía libre para ver qué es lo que la tienen tan distraída.
Hannah está revisando su página de Instagram y te das cuenta de que tu esposa está recibiendo mucha atención, ya tiene más de 7,000 seguidores, y eso que solo a posteado una veintena de fotos, te preguntas cuantos nuevos seguidores conseguirá cuando suba fotos vistiendo algunos de los sexys y vulgares conjuntos que compró a ayer con tu dinero.
Tu sexy esposa se sonroja al leer los atrevidos comentarios que todos los hombres han escrito, los comentarios de los machos negros son los más lascivos, vulgares y mal escritos.
Todos ellos expresan muy elocuentemente lo sexy que luce tu esposa y las obscenas cosas que le harían si la tuvieran entre sus negras manos.
Notas como Hannah se estremece al saberse tan deseada por todos esos masculinos y fuertes hombres negros, todos esos hombres reales… ese pensamiento aparece en tu mente de manera espontánea al recordar todos los sermones sobre la superioridad negra que Emily les ha estado predicando los últimos días.
Hannah entonces entra a los perfiles de aquellos perfectos dioses de ébano y notas como los pezones de tu esposa se ponen duros y erectos debajo de su ropa.
No es extraña esa reacción pues incluso tú tienes que admitir que aquellos poderosos machos negros lucen perfectos, varoniles, fieros y masculinos.
Nunca te habías imaginado que pudieran existir hombres tan altos, fuertes, musculosos y varoniles, y aquí en internet no hay uno ni dos, sino cientos, miles de perfectos machos africanos presumiendo sus perfectos cuerpos de adonis, luciendo como semidioses nubios.
Cada vez que ves el poderoso torso desnudo de alguno de aquellos perfectos guerreros africanos no puedes dejar de recordar la imagen que viste en el teléfono de tu hija, aquella obscena foto de Chloe de rodillas mirando a cámara con una monstruosa polla negra cubriendo su rostro, y una increíble cantidad de semen cubriendo su bonita cara.
Y por el modo en que tu esposa suspira, gime y se muerde los dientes, pareciera que ella también recuerda muy bien aquella pornográfica imagen.
Eventualmente Hannah entra en el perfil de Tyrell Black, el enorme entrenador negro del equipo de basquetbol que estuvo coqueteando con ella la noche del viernes.
Las provocativas fotos de ese sexy semental africano consiguen hacerte sentir pequeño, débil e inadecuado, en ese momento Alex baja a la cocina, y tu atención y la de tu esposa por fin abandonan la pantalla de su Smartphone.
La impresión al ver a tu bonito hijo es tanta que no puedes evitar escupir el café horrorizado.
Tu hermoso y rubio hijo está vistiendo un sexy BABYDOLL color azul claro, y un G-String a juego que cubre su diminuto pene, pero lo más llamativo de su atuendo son las altas zapatillas de plataforma con tacones de cinco pulgadas también de color azul claro.
Y aunque su rubio cabello luce esponjado y desaliñado tienes que admitir que tu precioso hijo luce como una pequeña prostituta adolescente.
“¡¿Alex, que diablos estás usando?!” Preguntas escandalizado, una cosa es que use esas vulgares prendas en la noche para, masturbarse, pero otra cosa totalmente diferente es que, vista como una pequeña zorra en el desayuno, frente a ti.
“¡Cállate Jerry!” Te ordena Hannah enfadada. “¡OH MY GOSH! ¡Luces simplemente hermoso mi bebé!”
“¡Maldita sea Alex! ¡Te ves espectacular en lencería! Veo que asumiste tu nuevo rol de inmediato hermanito. Pareces toda una princesa”. Chloe exclama y aplaude celebrando la nueva feminidad de tu hijo.
“¿En serio lo creen?”. Pregunta Alex con esa voz infantil, mimada y sexy más femenina que la de cualquier mujer.
Tu hermoso hijo gira ante ustedes sobre la punta de las zapatillas de plataforma de manera perfecta, justo como lo haría una bailarina experta.
Gracias a ese grácil movimiento todos pueden ver las gigantescas y blancas nalgas de Alex que se están tragando el hilo de la tanga.
No importa cuántas veces lo veas siempre te sorprende notar lo redondo, firme, burbujeante y gordo que es el culo de tu hijo, Chloe y Emily tienen razón, Alex heredó el trasero de su madre completamente.
“No sé cómo puedes dar vueltas de esa forma usando esas plataformas, yo apenas y puede caminar ayer cuando nos los probamos en la tienda”. Chloe dice entre enojada y asombrada.
“Tu hermana tiene razón cariño, yo ni siquiera me atrevería a bajar los escalones usando mis nuevas zapatillas y mírate, tú lo haces parecer tan natural. ¡Eres asombroso bebé!”. Tú también te sientes un poco celosa de la manera tan femenina de caminar de Alex.
“¡No es tan difícil! Solo es cuestión de apoyar el peso en la punta de los pies”. Explica Alex ruborizado.
“Lo dices como si fuese fácil hermanito, pero la única razón por la cual puedes hacerlo es porque pasaste años en esa academia de ballet. ¡Deberías enseñarnos!” Chloe le exige a Alex.
“Lo haré si tú me enseñas a bailar twerking. Tú y Emily parecían unas expertas en aquel video”. Alex se sienta a desayunar con la elegancia y delicadeza de una damita.
“¡Es cierto! Ahora recuerdo que le prometí a mamá que le enseñaría a hacer twerking, si quieres puedes unírtenos. Aún quieres aprender a bailar ¿verdad mamá?” Te pregunta tu hermosa hija emocionada.
Recuerdas el video en donde las dos chicas están sacudiendo sus traseros y un grupo de jóvenes negros las rodean mientras las tocan acarician y manosean.
“No sé… siento que tal vez soy demasiado vieja para hacer eso…” Responde tu esposa desanimada.
“¡Oh, Cállate mamá! ¡Solo tienes 35 años y con ese enorme y jugoso culo te verás increíble!” Chloe anima a su madre emocionada.
“¡Sí mami! Anda, si tú lo haces yo también, así Chloe puede enseñarnos a ambas. Y tiene razón, ese enorme culo que tienes está hecho para bailar twerking”. Alex le suplica a su madre con esos enormes ojos de ciervo tan tiernos que tiene.
“… ¿De verdad lo creen niñas?”. Pregunta sonrojada tu esposa como si las palabras de sus hijos fuesen halagos.
“Yo no lo creo… ¡lo sé!” afirma rotundamente Chloe.
“¡Esta bien! ¡En cuanto Alex acabe de desayunar podemos comenzar con esas clases de twerking JA-JA-JA-JA!” Se ríe nerviosamente Hannah.
“¡Sí!” Gritan al unísono tus dos hijos y Alex comienza a comer rápidamente sus panqueques con fresas y crema batida.
“Eso sí. Debemos cambiarnos antes de comenzar a practicar mamá” Ordena Chloe muy seria.
“¿Cambiarnos?” Pregunta Hannah confundida mirándose a sí misma.
Tu hermosa esposa está vistiendo una ajustada playera de tirantes que deja a la vista un tremendo escote, y un par de mamá-jeans que la hacen lucir increíblemente sexy. “Acaso no puedo hacer twerking con esto?”.
Chloe por su parte está usando un pequeño top de licra blanca y unos leggings color amarillo que llaman la atención a sus largas y torneadas piernas.
“¡No puedes usar jeans mamá! ¡Es como una regla que tienes que usar micro shorts cuando hace twerking!”. Explica Chloe de manera didáctica.
“¡Chloe tiene razón! ¡Hasta yo sé que es obligatorio usar micro shorts para bailar twerk! ¡Todas las chicas de los videos de rap que he visto los usan, ellas se ven fabulosas!” Alex ayuda a su hermana a convencer a su madre.
“Podremos estrenar esos bonitos shorts I ♥ BBC que compramos en QoS!” Exclama Chloe emocionada.
“¡Si mami! ¡Será fantástico, esos shorts son tan lindos!”. Alex da saltitos emocionado, lo que provoca que el BABY DOLL se sacuda muy provocativamente.
“Ok, ok. Después del desayuno lo haremos. Tú podrás enseñarnos a caminar en tacones altos y tu hermana puede mostrarnos como sacudir nuestros traseros de esa manera tan sexy”. Hannah explica el plan del día, y de nuevo todas regresan su atención a sus respectivos celulares.
Tu continuas en silencio, preparándote mentalmente para lo que viene.
Después de que Alex acabe de desayunar las tres hermosas chicas suben corriendo a sus habitaciones, riendo y charlando emocionadas.
Por supuesto te toca limpiar la mesa y lavar los trastes, incluso aunque tu preparaste los panqueques y el café te toca trabajar más.
Cuando terminas de lavar los platos, Hannah, Chloe, y Alex bajan todavía riendo femeninamente.
Las tres “niñas” están calzando zapatillas de plataforma con tacones de quince centímetros, y todas visten esos sexys y cortos micro shorts de mezclilla strech, no puedes creer lo ajustados que son.
El short de Hannah es de color blanco con las letras I ♥ BBC en estampado negro, sus tacones son blancos, los shorts de Chloe son negros con las letras blancas, ella está usando plataformas de color negro y los micro shorts de Alex son rosas con las letras blancas, sus zapatillas son por supuesto de color rosa pastel.
Los redondos culos de Alex y de Hannah estiran el material al límite y la mitad de sus gordas nalgas quedan descubiertas. El bonito y pequeño culo de Chloe también está al descubierto, aunque no se ve tan vulgar como el de su madre y su hermano.
Las tres sexys mujercitas están usando sendos tops de licra BLANCA que dejan ver los bonitos sostenes de encaje que están usando, incluso Alex trae puesto un bonito corpiño que resalta sus pequeñas tetitas adolescentes.
Chloe y Hannah caminan de manera lenta y pausada, e incluso tiemblan un poco al caminar, se nota que no están acostumbradas a usar tacones tan altos. Alex por otro lado camina y se mueve con una seguridad y elegancia propia de una princesa, como si hubiese nacido usando un par de aquel tipo de calzado.
“Creo que deberíamos comenzar aprendiendo a caminar sobre estos tacones sin temor a rompernos un tobillo antes de intentar bailar y sacudir nuestros bonitos traseros al ritmo de un buen rap”. Chloe opina mientras da un par de tambaleantes e inseguros pasos.
“Chloe tiene razón! Lexy cariño creo que tú serás el primero en enseñarnos tus talentos”. Puedes ver como tu esposa también se esfuerza por no caerse a causa de esos tacones de quince centímetros.
Alex se ruboriza al saberse el centro de atención, es obvio que no está acostumbrado a ser el líder o maestro de su madre y hermana.
“¡Está bien! Les enseñaré todo lo que sé, pero en realidad no es tan difícil”. Explica Alex con modestia.
Tú continuas en la cocina, sentado en el comedor mirando a la sala donde aquella escena se está desarrollando. Te preguntas por qué diablos continuas ahí, sentado mirando como esas tres sexys hembras practican como lucir más sexys y apetecibles para los hombres negros.
De verdad quieres largarte de aquí, subir a tu habitación y trabajar un poco, pero por alguna razón no puedes levantarte de la silla, es como si estuvieses pegado a ella.
Así que continúas mirando, grabando cada detalle a fuego en tu memoria.
Por fin la clase de Alex comienza.
“¡Muy bien! Madame Papillon me enseñó como caminar en la punta de los pies incluso sin usar tacones, y funciona así. Deben tener la espalda completamente recta. Los hombros hacia atrás y el pecho hacia adelante. El rostro mirando hacia el frente la barbilla ligeramente hacia arriba. Recarguen su peso en la punta de los pies y saquen sus nalgas hacia atrás. Mantengan las piernas completamente extendidas, dejen colgar sus brazos de manera relajada y quiebren sus muñecas a la altura de la cintura”. Alex comienza a dar órdenes mientras realiza aquellos movimientos para demostrar cómo se hace.
Hannah y Chloe tratan de copiar la elegante pose en la que ha quedado Alex después de realizar aquellos movimientos.
Alex se acerca a ellas y les obliga a mover esta o aquella extremidad, a sacar más los pechos o para más la cola.
Cuando está conforme con el resultado Alex realiza aquella pose de nuevo con una facilidad y naturalidad abrumadoras.
“Ahora viene lo complicado. Deben dar pasos cortos y firmes, un pie delante del otro, cruzando las piernas, y meneando las caderas de un lado a otro, asegúrense de poner el peso de su cuerpo primero en la punta de los pies y después en el talón”. Alex instruye a su madre y a su hermana de manera experta mientras comienza a caminar de manera absolutamente femenina y sexy.
“¡Maldita sea Alex! ¡Lo haces parecer tan sencillo, pequeño marica!”. Chloe exclama un poco enfadada mientras trata de copiar la sensual manera de caminar de su hermano.
“¡Esto es más difícil de lo que pensé que sería! ¡Eres increíble bebé, caminas tan sensualmente, como toda una Top-model!”. Hannah llena de elogios a su niño especial.
Chloe, Hannah y Alex pasan las siguientes dos horas practicando como caminar, y al final incluso tú te sientes emocionado al ver la elegante y sensual manera de moverse de Chloe y Hannah sobre esos altísimos tacones.
Alex aplaude y felicita a su madre y a su hermana por su increíble avance, y ahí están las tres paseando de un lado a otro balanceando sus nalgas de un lado a otro, exhibiendo sus tetas hacia delante y parando su trasero como perras en celo. Con aquella reveladora ropa y esas plataformas lucen completa y absolutamente vulgares. Como un trio de putas baratas. Pero no puedes negar que también se ven increíblemente sexys.
“¡Así se hace chicas! ¡Mamá trata de levantar un poco más el rostro! Sé que esas enormes tetas deben pesar una tonelada, pero trata de mantener la espalda recta”. Nunca habías visto a Alex tan asertivo, tan confiado, es obvio que el poder enseñar una habilidad que domina ha despertado sus dotes de liderazgo. “Chloe, trata de mecer más tus caderas, de lado a lado, recuerda quebrar tu cintura, exagera el movimiento de tus nalgas lo más que puedas”.
“¡OH MY GOSH Lexy! Eres una maestra muy estricta cariño”. Hannah se burla de tu hijo con una risita, pero sigue las instrucciones de su niño especial lo mejor que puede.
“¡¿Quién podría pensar que un pequeño Sissyboy tan tímido y sumiso como tú podría ser tan severo!?” Chloe también se ríe de la estricta forma de enseñar de su hermanito.
Alex se ruboriza y sonríe de manera culpable.
“Lo siento, mami. Lo siento Chloe. Solo quería enseñarles todo lo que sé”. Alex se excusa avergonzado, y su personalidad sumisa y dócil regresa de inmediato y tu hijo de transforma de nuevo en el pequeño y dulce sissyboy que siempre ha sido.
“¡Solo estamos bromeando bebé!” Explica Hannah abrazando a su niño especial. “¡Gracias por mostrarnos como se hace! ¡Eres un excelente profesor!”.
Chloe y tu esposa abrazan a Alex y le agradecen entre mimos por sus consejos y enseñanzas.
“¡Ustedes dos aprenden muy rápido! Ya casi son unas expertas, solo les falta un poco más de seguridad, pero si practican a diario, o mejor aún si usan este tipo de zapatillas a diario, pronto podrán no solo caminar, si no saltar, girar e incluso bailar usando plataformas como estas”. Alex anima a su madre y a su hermana alegremente. “Si se esfuerzan incluso podrán hacer cosas como esta!”.
En ese momento de manera espontánea y sorpresiva tu hermoso hijo varón realiza un perfecto giro hacia atrás digno de una gimnasta olímpica, sus largas y torneadas piernas se mantiene completamente rectas mientras gira en el aire sin usar las manos.
Alex cae sobre la punta de sus altos tacones con la suavidad y ligereza de un gato.
Tú, Hannah y Chloe se quedan en silencio durante medio minuto con los ojos completamente abiertos sin creer que es posible hacer semejante acrobacia usando aquellas altísimas plataformas.
Alex luce orgulloso y alegre y entonces Hannah comienza a aplaudir emocionada, pronto Chloe y tú la imitan, pues, aunque estas en contra de aquellas lecciones que han improvisado las tres mujercitas no puedes dejar de admirar la habilidad de tu hijo.
“¡OH MY GOSH! ¡Lexy eres simplemente asombrosa!” Exclama Chloe mientras aplaude. ¡Tienes que enseñarme a hacer eso!”.
“¡Cariño eres increíble, ¿cómo puedes si quiera mantener el equilibrio de esa manera?!” Hannah también alaba las asombrosas dotes de bailarina que posee su niño especial.
Alex se sonroja aún más y se cubre el rostro de manera tímida, pero es más que obvio que le encanta que su madre y su hermana lo admiren de aquella manera.
“¡Oh dejen eso! ¡No es nada especial! ¡Mejor continuemos y que Chloe nos muestre como bailar twerking! ¡Quiero saber mover mi culo antes de ver a mi BLACK DADDY de nuevo!” Alex dice riendo. “¡Además, mamá y yo debemos estar listas para la siguiente fiesta a la que nos invite Emily!”
“¡Eres tan puta Alex!” Chloe exclama escandalizada. “¡Pero tienes razón, es hora de mover esos traseros!”
“¡Sí! ¡Alex tiene razón! ¡Es mejor que aprendamos a hacer Twerking antes de ir a alguna fiesta llena de sexys hombres negros! ¡No queremos decepcionarlos ¿o sí?”. Hannah está de acuerdo con su niño bonito, y en ese momento te das cuenta de que Hannah ya ha decidido acompañar a Chloe y Emily a alguna de esas horribles fiestas de negros.
“¡Esa es la actitud mamá!” Chloe abraza a su madre y después enciende el televisor y cambia de canal hasta que encuentra una estación que reproduce videos de música RAP.
“Perfecto. Esta canción también es muy buena y el video es increíble. Solo miren a las chicas y traten de copiar sus movimientos”.
Tú ves el video en la enorme pantalla en tu sala y no puedes creer que transmitan aquello en un canal normal de televisión. Sí no lo supieras, pensarías que aquel video solo podría verse en el canal PLAY BOY, HUSTTLER o directamente en PORN HUB.
La pantalla está llena de hermosas chicas blancas sacudiendo sus traseros a la cámara y un montón de hombres negros grandes y macizos.
Chloe comienza a mostrarles a su madre y a su hermanito como abrir las piernas, doblar la cintura y arquear la espalda de manera provocativa y entonces comenzar a sacudir sus redondas y respingonas nalgas al ritmo de un vulgar y obsceno rap.
Miras a tu hija entre asqueado y sorprendido, ella copia los sexys movimientos de aquellas putas blancas en la pantalla y maldita sea, su trasero realmente se está moviendo.
“¡OH MY GOSH Chloe! ¡Eres realmente buena en esto hija!”. Exclama Hannah.
“JI-JI-JI! ¡Gracias mamá! ¡Sin embargo, te lo debo todo a ti! ¡Si no hubiese heredado la forma de tu culo, no me vería tan bien haciendo twerking! Aunque desearía que el mío fuese tan grande y gordo como el tuyo y el de Alex” Contesta Chloe alegremente.
“¡Oh cállate Chloe! ¡Yo mataría por un culo más pequeño! Siempre he pensado que mis nalgas son demasiado gordas” Dice tu esposa mientras se mira su gigantesco culo de yegua.
“Los tiempos son diferentes, mamá, a los hombres de hoy les encantan los culos grandes como el tuyo y el de Alex. Quiero decir, mira el video”.
Chloe está en lo correcto. A todos los negros guapos y musculosos del video parece gustarles mucho el trasero gordo de las chicas blancas. Pues todos los raperos negros no pierden la oportunidad de agarrar, azotar e incluso besar los redondos y gordos culos blancos que se menean alrededor de ellos, las hermosas y sexys niñas blancas por su parte siguen sacudiendo sus traseros salvajemente mientras sonríen para aquellos sementales negros.
Hannah y Alex comienzan a seguir el ritmo después de un par de videos. Sacudiendo sus carnosas nalgas al ritmo de la música, mientras doblan la cintura, a veces se ponen en cuclillas, y al final las tres mujercitas de la casa terminan en cuatro patas sacudiendo sus lindas colas como perras en celo.
Tú esposa, tu hija y tu hijo pasan las siguientes dos horas bailando y sacudiendo sus respingadas nalgas frente al televisor, realizando un montón poses sumamente sensuales.
“¡Eso es mamá! ¡Estás hecha para esto!” Chloe anima a su madre muy contenta de ver que tan rápido aprende. “¡Vamos Alex para más esa enorme cola que tienes y trata de que tus nalgas choquen una contra la otra! ¡Así, así… ya lo tienes niña!” Chloe da instrucciones a su hermanito y este como siempre obedece al pie de la letra las ordenes de su hermana mayor.
“¡En realidad esto es un poco divertido!” Hannah se ríe “¡La música también me está empezando a gustar mucho!”
“¡El RAP es lo mejor para hacer twerking!” Chloe dice, bajando hasta el suelo y entonces sacude muy intensamente su trasero.
“¡Sí! ¡Esa canción se titula I LOVE THOTS! ¡Me encanta!”. Grita Alex por encima de la obscena letra de aquel ruidoso RAP.
“Qué es una THOT?” Pregunta curiosa Hannah sin dejar de sacudir su trasero.
Alex y Chloe se miran y sonríen con complicidad.
“¡Tú eres una THOT mamá!” Dice Chloe y entonces ella y Alex comienzan a reír histéricamente.
Hannah frunce su entrecejo un poco molesta, y su mirada se vuelve severa, es la mirada de madre estricta que rara vez hace.
“¿Se están burlando de mí?” Pregunta Hannah, pero continúa meciendo su culo sensualmente.
Los niños dejan de reír y le miran sonriendo.
“Para nada mami. ¡Chloe también es una THOT!” Explica Alex tratando de calmar a su madre.
“¡Tú también eres una pequeña THOT Alexis!” Exclama Chloe risueña.
Y de nuevo Alex y Chloe se sueltan a reír escandalosamente.
Hannah se detiene por fin, se pone de pie y cruza sus brazos de manera autoritaria, lo que provoca que sus enormes tetas luzcan aún más gigantescas.
“¿Me van a explicar que es una THOT, sí o no?” Pregunta Hannah fingiendo enojo pues ya se dio cuenta de que aquella palabra, THOT, no es un insulto.
Tú también tienes curiosidad por saber el significado, aunque por la letra de aquel RAP puedes imaginarlo.
“Una THOT es cualquier niña blanca como nosotras, que viste de manera sexy. Una THOT es una niña blanca que se viste como una puta para negros… una THOT es cualquier mujer que luzca como una zorra ennegrecida, mami” Explica Alex con esa nueva voz de maestra de escuela.
Hannah mira a Chloe como preguntándole si Alex ha dicho la verdad. Chloe asiente lentamente.
Y entonces después de unos momentos de silencio las tres rompen reír de manera histérica.
Tú como ya es costumbre no puedes creer lo que estás escuchando y viendo.
“Supongo que tienen razón. Las tres somos unas lindas y sexys THOTS”. Exclama Hannah alegremente entre risitas tontas.
“¡Hannah! ¡¿Acabas de decir que eres una puta para hombres negros?!” Preguntas a voz en grito a tu esposa.
Como siempre acabas levantando la voz, furioso por escuchar a tu esposa tan contenta con la idea de serte infiel con hombres negros.
Las tres mujercitas paran de reír y Hannah te mira enojada, esta vez es furia real.
“¡Oh por Dios! ¡¿Desde cuando estás ahí Jerry?! ¡¿Qué diablos haces ahí escondido espiándonos como un maldito bicho raro?!” Te reclama Hannah completamente furiosa.
Tú retrocedes asustado, pero de nuevo recuerdas que Hannah acaba de admitir que ella es una THOT, y una THOT es una Puta para hombres blancos. Tienes toda la razón para estar enojado, tú estás en lo correcto y ella está equivocada.
“He estado aquí desde que terminamos de desayunar, ustedes estaban demasiado ocupadas caminando y bailando con esa horrible música para darse cuenta. Pero eso no es importante, tú acabas de aceptar que eres una THOT, una puta ennegrecida, o una zorra para hombres negros o lo que signifique esa palabra… ¡¿Por qué dirías algo como eso Hannah?!” Preguntas indignado.
“¡Maldita sea Jerry! ¡Yo nunca dije que yo fuera una puta blanca para hombres negros! ¡Solo dije que las tres parecemos zorras ennegrecidas! ¡Solo dije que las tres somos unas lindas y sexys THOTS!¡No tienes que restregarme en la cara que Alex y Chloe son unas afortunadas zorritas ennegrecidas y yo no! ¡Cuando dije que las tres somos unas lindas THOTS lo dije solo para sentirme incluida, no puedo creer que quieras arruinar el lindo momento que estoy viviendo con mis hijas!” Hannah explota contra ti completamente furiosa e indignada.
De nuevo retrocedes completamente acobardado, y antes de que puedas decir una palabra, Alex y Chloe se unen a Hannah y comienzan a gritarte, recriminarte y humillarte por ser un cerdo racista, retrograda, y privilegiado.
Después de soportar cinco minutos de reproches y gritos de aquellas tres furiosas mujercitas terminas prácticamente de rodillas pidiendo perdón mientras tratas de contener las lágrimas.
“¡Ya te lo había advertido Jerry! ¡Te dije que si volvías hablar como un maldito niño blanco racista y privilegiado te quedarías una semana entera durmiendo en el sillón! ¡Espero que disfrutes dormir aquí abajo hasta el próximo domingo!” Hannah decreta tu penitencia como una reina condenando a un esclavo que se hubiese atrevido a rebelarse.
“¡Así se hace mami!” Aplaude Alex alegremente.
“¡Eso es lo que te ganas por ser un maldito racista papá!” Exclama Chloe furiosa.
“Pero… pero… pero tenemos una habitación para invitados… ¿Por qué tengo que dormir en el sillón? Puedo dormir en la habitación de invitados…” Ruegas patéticamente.
“¡Ni lo pienses! ¡Eres un pequeño y horrible hombre blanco racista y retrógrada! ¡No tienes derecho a elegir tu castigo! ¡Ahora cállate y obedece Jerry! ¡Es para lo único que eres bueno!” Hannah te gritó aquello con un intenso odio e cada una de sus palabras.
De nuevo tus hijos aplauden emocionados y felicitan a su madre por castigarte de aquella manera.
Tú estás a punto de llorar de rabia y tristeza, y no quieres creer que tus hijos te desprecien tanto como para celebrar con aplausos tu humillación, pero la cruda realidad es esa.
Acobardado, escapas del departamento.
Mientras bajas en el ascensor te ves obligado a limpiar un par de lágrimas de tus mejillas, te sientes profundamente desdichado por el rumbo que está tomando tu vida.
Decides dar un paseo en tu viejo y destartalado auto, tal vez un poco de aire ayude a aclarar tu mente.
Después de pasear por el muelle y comer una grasosa hamburguesa, regresas más tranquilo a casa a eso de las tres de la tarde.
Al entrar encuentras a Hannah, Chloe y Alex aun bailando y sacudiendo sus jugosos traseros frente al televisor.
En la mesita para el café puedes ver los restos de sushi y comida china, también hay una botella de vino casi vacía y tres copas medio llenas.
Ninguna de las tres hermosas niñas blancas reacciona a tu presencia y continúan riendo, bebiendo y bailando twerking, se turnan para grabar y tomar fotos con sus celulares. Tú puedes imaginar que harán las tres con esas imágenes.
Alex y Chloe enviran esas sensuales fotos a sus respectivos novios negros, mientras que tu esposa seguramente posteará esos videos y fotos en su Instagram.
Pasas el día trabajado, y solo bajas a preparar la cena, tu esposa y tus hijos continúan charlando bebiendo y bromeando.
Por un momento tienes el impulso de prohibir que Alex beba vino siendo aún menor de edad, pero al recordar que tu familia está feliz de que Alex, un niño varón de quince años sea la pequeña puta de un maduro macho negro… y que incluso tú lo has llegado a aceptar, te das cuenta de que sería ridículo y simplemente caminas a la cocina en silencio.
La cena transcurre contigo en silencio y con la vista baja mientras tu familia continúa charlando animadamente, todas ellas continúan vistiendo aquellos micro shorts elásticos con las letras I ♥ BBC estampadas en sus bonitas nalgas.
La plática entre las tres niñas blancas gira en torno a lo sexys que son las tres, y lo divertido que es bailar twerking y cuánto tiempo practicarán a diario para estar listas para cuando se encuentren con sus respectivos sementales negros.
Por fin tu familia sube a dormir y tú bajas un par de cobijas del cuarto de invitados y te resignas a dormir en el sillón, por supuesto podrías desobedecer a Hannah y pasar la noche en el cuarto de invitados, pero como siempre, te das cuenta de que te falta valor para atreverte a hacer aquello.
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